Esta es una primera evaluación de una nueva selección de restaurantes de nuestra ciudad, en su mayoría de reciente apertura, que ofrecen unos menús de alta calidad con un precio ajustado y razonable (entre los 16 y 18 euros). El primero, que he visitado con un resultado altamente satisfactorio y que paso seguidamente a comentar, se trata del restaurante FLOR PARANINFO ubicado, como su propio nombre ya indica, en el señorial edificio de la antigua facultad de medicina de la plaza de Paraíso.
Restaurante valorado: FLOR PARANINFO (Menú de 16 euros + IVA)
Dirección: Plaza de Basilio Paraíso nº 4 (planta calle)
Tel reservas: 976 215 334
Mail: info@restauranteparaninfo.com
En cualquiera de sus tres opciones de menú, podemos optar por varios vinos a elegir, en este caso, me decidí claramente por un Aldeya tinto 2011 de Bodegas Pago de Aylés (Aldeya significa aldea, y el vocablo proviene del árabe Al day¨ ah) un varietales que, por su coupage de Syrah, tempranillo, merlot y cabernet, sería perfecto para maridar con variedad de sabores con la habitual complejidad y versatilidad de estos caldos. Y pienso que la elección fue acertada.
LOS PLATOS:
1) Rollitos de salmón marinado con salsa cremosa de wasabi. (Plato destacado)
Un plato original , de inspiración japonesa, en su concepción y presentación visual. Con un mezclum de lechugas muy fresco y bien seleccionado, contiene diversos elementos, entre los cuales están varias piezas de maki-sushi envueltas en alga nori con arroz, salmon y un toque ligeramente picante de piparra. Sabores agridulces que recuerdan a esa cocina oriental mediante una combinación de salsas en las que se ha suavizado el nivel de picante del wasabi (rábano japonés de característico color verde pistacho) convirtiéndolo en una salsa cremosa que se combina en el mismo maki con el dulzor de una mermelada de frutos rojos que logra ese contrate de sabores entre el dulce y el picante. El salmón va envuelto en unos finísimos fideos de patata que aportan el toque crujiente del plato contrastando con la carnosidad del salmón marinado.Un plato excelente a nivel visual, con una cantidad más que suficiente si valoramos todos los elementos que lleva el plato y con una alta calidad. Combinación de sabores complejos que contrastan entre sí para este original plato de isnpiración oriental (mucho más que una ensalada) que me ha gustado mucho. Sobresaliente.
2) Carrilleras estofadas al vino tinto con espuma de patata y zanahoria. (Plato destacado)
Más sencillo a nivel visual, mantiene un alto contraste de colores debido al oscuro color de la carne (um marrón profundo, casi negro), el naranja de la zanahoria y la fina crema del puré de patata. Un plato bastante minimalista en su concepción, pero con una cantidad más que correcta (las raciones son más que suficientes para un comensal medio, con tres buenas porciones de carne), en el que prima la calidad del producto y el intenso sabor de la carne de ternera,( es más habitual que en un menú las sirvan de cerdo). una carne melosa, muy tierna, que se deshace ne la boca y que combina a la perfección con las crema de patata y zanahoria. Muy aromático, producto sin duda de la lenta reducción del jugo de las propias carrilleras con el vino tinto, adornado con un par de ramitas de cebollino verde, resulta un auténtico placer saborearlo lentamente, sin prisas, dejando que el paladar se inunde de sabor en cada bocado. Unas carrilleras de diez para un plato que busca más la armonía de tiernas texturas que sus contrastes.
3) Tarta de manzana con toffe.
Un postre clásico (el tatin de manzana) con un toque de vanguardia en su presentación visual, creando una esctructura de elementos circulares que de combinan entre sí tomando como base el propio plato blanco que actúa a modo de lienzo. la uniformidad de colores tierra (manzana, caramelo y helado de canela) la rompe el toque de color de unas aromáticas hojitas de hierbabuena.Una oblea bajo el helado aporta la textura crujiente en un postre delicioso el que el mayor contraste se manifiesta a través de las temperaturas. La manzana compotada, tierna y carnosa, contrasta también con la cremosidad del helado y con el crujiente de la oblea antes mencionada. Presentado en buena cantidad, lo que hará las delicias de los lamineros/as. Mantiene y refuerza la línea de calidad del menú, constituyendo una buena culminación del mismo.
El café, sabroso y con cuerpo, pero suave, también de indudable calidad. Un mal café puede dejar un mal sabor de boca a una buena comida y es un elemento que hay que cuidar, como todos.
calidad, buen producto tratado con mimo y un servicio atento y profesional. Los guiños a la vanguardia no están reñidos en este caso con esa cocina casera que cuida en extremo las elaboraciones con cocciones
lentas, buenas reducciones y productos frescos de calidad. Si a ello le añadimos la ubicación céntrica y privilegiada y el marco del imponente edifico de la antigua facultad, se erige en una opción más que recomendable para el comensal que busque disfrutar con calma de un menú de calidad a un excelente precio, muy por encima de opciones de precio similar y/o superior (se puede codear tranquilamente con menús de precio bastante superior). Un menú sin duda muy recomendable de un establecimiento en el que espero poder profundizar aún más adentrándome en el nivel superior de las fórmulas que ofrece. Estamos pues de enhorabuena por contar con otro gran restaurante que ofrece una buena gastronomía oculto tras la calma de los gruesos muros del edificio Paraninfo.